Nos situamos en 1992, en Colombia. Una niña de nueve años, Cataleya, asiste al homicidio de sus padres. Será entonces cuando huya a Estados Unidos a refugiarse en casa de su tío Emilio (Cliff Curtis, Airbender, el último guerrero), que se ha convertido en un gánster. Este enseñará a Cataleya a matar para convertirla en una asesina profesional y sin escrúpulos. Quince años más tarde (ya convertida en Zoë Saldana, Avatar, Stark Trek), trabajará para él firmando sus homicidios con una orquídea dibujada en el torso de sus víctimas, un mensaje dirigido a los asesinos de sus padres. Porque Cataleya, no olvida (ni la muerte de los suyos ni sus raíces) y decidirá remover el pasado y llevar hasta el final su venganza, aún a riesgo de perder a todos aquellos a los que quiere y de sacrificar su propia vida.
Producida por Luc Besson, esta cinta de acción, coproducción entre Estados Unidos y Francia, está dirigida por Olivier Megaton (Transporter 3), y como curiosidad, encontramos en el reparto la presencia del español Jordi Mollá (Noche y día, Son de mar) en el papel del malvado narcotraficante al que Cataleya persigue por haber matado a su padre.